Los resultados de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana (ENSU) de diciembre 2023 arrojaron que en Fresnillo 96.4% de la población mayor de 18 años se siente insegura en su ciudad. Desde el cuarto trimestre de 2022 Fresnillo es la ciudad con mayor porcentaje de personas que se sienten inseguras en su ciudad. A partir de este trimestre, la percepción de inseguridad no ha bajado de 90%, siendo el punto más alto el cuatro trimestre de 2022 con 97.7 por ciento de las personas que se sienten inseguras, y el valor más bajo de 92.8%.
Dentro de la misma encuesta, se pregunta sobre la atestiguación de conductas antisociales o delitos. Para el último trimestre de 2023, 78.8% de las personas vio o escuchó disparos frecuentes con armas cerca de su vivienda; no obstante, esta atestiguación ha disminuido en 3.9 puntos porcentuales. Haciendo la comparación entre el porcentaje de la población que presenció conductas antisociales entre el último trimestre de 2023 y el último trimestre de 2020, todas han disminuido.
Entre los elementos que componen la percepción de inseguridad también se menciona la victimización. En la ENSU se realiza una estimación de hogares víctima del delito por semestre. En la primera medición que hay, primer semestre de 2018, 36.6% de los hogares en Fresnillo fue víctima de al menos un delito, la tendencia ha ido a la baja, y para el segundo semestre de 2023, solo 15.9 por ciento de los hogares fue víctima de algún delito. Es importante mencionar que en la ENSU sólo se consideran los delitos de extorsión, robo en casa habitación, robo o asalto en calle o transporte público, robo parcial de vehículo, robo total de vehículo y otros robos, por lo que otros delitos, como homicidios, no están contemplados para la estimación.
¿Cómo se puede explicar que Fresnillo sea la ciudad con el porcentaje de percepción de inseguridad más alto si la atestiguación de conductas y el porcentaje de hogares víctimas del delito van a la baja? Las encuestas y otros proyectos estadísticos ayudan a conocer las características, en este caso de la percepción de la inseguridad en momentos específicos, y a conocer los patrones y tendencias y, de esta manera, poner el foco en fenómenos o zonas particulares y, a partir de ahí, hacer la integración con otras fuentes de información para identificar los problemas, entenderlos y proponer soluciones.