Lugar: La Roma Brunch Canteras
Dirección: Av. Fuentes del Lago 101, Fuentes del Lago, Aguascalientes, Plaza Dos Lagos
Horario: 08:00 a 14:00. De lunes a domingo
Métodos de pago: Tarjetas bancarias y efectivo
Los domingos tienen un encanto peculiar. Es el día en que el tiempo parece desacelerarse, permitiéndonos saborear cada momento con tranquilidad y deleite. Y qué mejor manera de empezar este día de descanso y tranquilidad que con un desayuno que despierte todos nuestros sentidos y nos prepare para las delicias que están por venir. En estas reseñas, me aventuro a explorar el arte de desayunar los domingos con mi gran amigo perruno Babbo, un Yorkshire terrier de tres años, sumergiéndonos en un mundo de sabores, aromas y atención.
Con los primeros rayos de sol del domingo, Babbo y yo nos despertamos para prepararnos e ir a desayunar. El día anterior habíamos estado buscando opciones para almorzar en lugares que fueran explícitamente amigables con las mascotas, ya que disfruto enormemente compartir experiencias culinarias con mi gran amigo.
En esta ocasión, nos tocó visitar el Restaurante La Roma Brunch. Al llegar, fuimos recibidos con gran amabilidad por el personal del lugar. Optamos por sentarnos en la terraza, ya que iba acompañado por Babbo y no queríamos incomodar a nadie. Es importante destacar que se nos permitió elegir libremente dónde sentarnos, lo cual aprecié como una muestra de atención hacia Babbo.
La terraza es un espacio muy bien distribuido, con mesas limpias y sillas cómodas. A los lados, cuenta con protección contra el viento, lo cual resultó especialmente útil ya que ese día se sentía un poco fresco. Además, dispone de suficientes sombrillas que proporcionaban una excelente cobertura contra los rayos de sol que comenzaban a aparecer poco a poco.
A los pocos minutos de haber elegido nuestra mesa y sentarnos, una joven mesera se acercó y nos entregó el menú. Luego me preguntó si deseaba alguna bebida, mientras yo hacía mi elección, ella regresó a la barra y volvió con un recipiente con agua para Babbo, el cual lucía limpio a simple vista.
Para desayunar, opté por unas enfrijoladas con carne asada acompañadas de café de olla. Es importante mencionar que el café no era el mejor que he probado, pero tenía un sabor aceptable. Las porciones y la presentación de mi plato principal fueron muy buenas; el sabor también estuvo a la altura. Al terminar, decidí probar el strudel, que venía acompañado de helado, y realmente complementó muy bien el sabor del postre.
En todo momento, la atención fue excelente. Ni los comensales ni el personal del restaurante mostraron ningún gesto molesto por tener a Babbo en una silla acompañándome. Es importante destacar que él está acostumbrado a comportarse en lugares públicos; no ladra ni se sube a las mesas. Esto se debe a que desde cachorro lo llevé a todo tipo de lugares y siempre lo paseo antes de entrar a cualquier establecimiento.
En general, puedo decir que es un lugar agradable, con una atención excelente y realmente amigable con las mascotas. Tanto la comida como las bebidas son de buena calidad, y el precio osciló alrededor de los $300. Me dejó una buena impresión que definitivamente me hará regresar para probar más platos de su menú; por ejemplo, me quedé con ganas de probar la mimosa que ofrecen. Como algo adicional, sería conveniente que incluyeran el menú de alimentos en sus páginas y redes sociales para una mayor accesibilidad y referencia.
Calificación
Calidad/precio ****
Ambiente *****
Servicio *****
Alimentos ****
Pet Friendly *****